Santiaguiños: Rosquillas dulces gallegas
Santiaguiños, Rosquillas dulces gallegas o Cantaritos son un dulce típico gallego. Su origen se remonta al siglo XVIII, cuando se utilizaban como regalo de bodas y como recuerdo de bautizo. Se trata de una receta muy sencilla, de la que existen numerosas variedades, y que suele acompañarse de alguna bebida, como el café, el té o el aguardiente.
La receta tradicional consta de una masa de harina de trigo, aceite de oliva y agua, a la que se le añade anís y una pizca de sal. Esta masa se debe amasar bien, hasta obtener una textura homogénea. A continuación, se hacen pequeñas bolitas con la masa, que se fríen en aceite caliente y se doran por ambos lados. Por último, se pasan por una mezcla de azúcar y canela.
Ingredientes
Para la masa
- 500 gramos de harina de trigo
- 200 ml de aceite de oliva
- 200 ml de agua
- 1 cucharadita de anís
- 1 pizca de sal
Para el baño
- 100 gramos de azúcar
- 2 cucharaditas de canela
Receta
En un bol mezcla la harina con el aceite, el agua, el anís y la sal. Amasa bien con tus manos hasta obtener una masa homogénea. Si es necesario, puedes añadir un poco más de agua para obtener la textura adecuada.
Una vez tengas la masa lista, haz pequeñas bolitas con ella. En una sartén con aceite caliente fríelas por ambos lados, hasta que estén doradas.
Cuando estén listas, ponlas en un recipiente con el azúcar y la canela. Mezcla bien para que queden bien cubiertas con la mezcla.
Historia y curiosidades
Los Santiaguiños se originaron en Galicia en el siglo XVIII. Esta receta se utilizaba como regalo de bodas y como recuerdo de bautizo. La forma de las rosquillas simbolizaba el camino de Santiago de Compostela.
Durante el siglo XX se popularizaron mucho, hasta el punto de convertirse en uno de los dulces típicos gallegos. Actualmente, estas rosquillas se pueden encontrar en cualquier supermercado y están presentes en muchos mercadillos y ferias de pueblo.
Existen muchas variedades de Santiaguiños, como los rellenos de crema pastelera o de nata. También hay algunas recetas que incluyen otros ingredientes, como la ralladura de limón o el zumo de limón.
Consejos de presentación
Los Santiaguiños son una receta perfecta para servir en cualquier momento. Los más tradicionales se suelen acompañar de alguna bebida, como el café, el té o el aguardiente.
Estas rosquillas dulces se pueden servir en cualquier tipo de plato, desde una fuente de cerámica a una bandeja de metal.
Si quieres darle un toque especial a la presentación, puedes servir los Santiaguiños en una cestita de mimbre. Otra opción es hacer una presentación más moderna, con una fuente de cristal.
Puedes añadir un toque decorativo a la presentación, colocando una ramita de canela en el plato. Otra idea es añadir una bola de helado de vainilla a cada plato, para darle un toque refrescante.
Los Santiaguiños se pueden servir tanto calientes como fríos. Si los quieres servir calientes, puedes calentarlos en el microondas durante unos segundos.
Ya solo te queda disfrutar de esta receta tradicional gallega. ¡Esperamos que te gusten!
